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Sex., Mar.

El 21 de noviembre de 1931 se daba oficialmente el inicio de la Sociedad de San Pablo en la Argentina y, con este paso, se abría a la Familia Paulina la posibilidad de instalarse en estas tierras australes. Por eso, el 21 de noviembre de 2021, celebrando a Cristo Rey, toda la Familia paulina se vistió de fiesta y se dio cita en la catedral de Buenos Aires. El Cardenal Mario Aurelio Poli, arzobispo metropolitano de Buenos Aires y primado de la Argentina, presidió la Eucaristía de acción de gracias a Dios y de gratitud con todos los hermanos y hermanas que han sembrado, a lo largo de todos estos años, la semilla del Evangelio, según el carisma del beato Santiago Alberione.

El cardenal Poli, en su homilía, centrada sobre la realeza de Cristo, también exaltó la labor discreta y eficaz desarrollada en la Iglesia argentina por la Familia Paulina y, de paso, puso en evidencia la urgencia de trabajar también en los nuevos campos de evangelización que ofrece hoy la cultura de la comunicación, a lo cual añadió luego un desafío de gran talla para nuestra misión: integrarnos en el nuevo proyecto de catequesis que acaba de emanar el sínodo arquidiocesano.

Por su parte, el P. Valdir José De Castro, Superior general, en su mensaje para la circunstancia, nos recordó la necesidad de trabajar juntos, de vivir como “artesanos de comunión”, renovando nuestra forma de pensar y caminando con pasión y humildad por los caminos que el Señor nos muestra. En definitiva: mirar al pasado con gratitud, pero lanzarse hacia adelante en la misión.

 

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